domingo, 3 de julio de 2011

Llama a mi puerta

Llama a mi puerta y yo te abriré, si tus ojos me conmueven podrás entrar.
Llama a mi puerta y yo te abriré y si tu mirada no sostiene la mía,
te pediré que te vayas en paz.


Todo puedo darlo, todo menos mi integridad.
Todo podéis cogerlo, con vuestra virtud.
Si no es así, será solo un lienzo vacío cuanto recibáis.


Llama a mi puerta y yo te abriré, aunque me haya enojado, si la lealtad
anida ya en tu ser. No quiero que mi comprensión se seque inutilmente.


Llama a mi puerta... si no contesto, puedes empujarla suavemente.
Habrá llegado el día en que emprendamos juntos un nuevo tiempo.                                         

No hay comentarios:

Publicar un comentario