viernes, 30 de agosto de 2013

No quiso salir de su quimera...




No quiso salir de su quimera ,
adornó el herraje de los barrotes
con un beso de oscuro carmín .

El carcelero del espejo buscó sus labios,

como tortura de su propia mazmorra ...
pero solo pudo entreveer el verdeazul
que tapiaba aquellos párpados .
Debajo , esos ojos lloraban nieve .

El atardecer perfila las rejas sobre el muro
mientras sus dedos acarician los reflejos.
Su blancura de cera tiembla
como un ave que agoniza sin alas.

¿Alguna vez el deseo de sus manos
acarició aquello que se llamaba amor?
Una palabra aprendida casi irreal.
solo una palabra , apenas audible,
herida desde las entrañas,
intentando atrapar su voz desde el presagio.

Una luminaria de cera gotea en su frente,
mientras el ocaso sueña con la alborada .

La cabellera oculta su rostro
negra cascada que la humedad peina.
El sesgo del silencio
alerta al celador de la vida ,
que acude con su aguijón de muerte .

Hoy , una aséptica gota de veneno,
mañana ... nuevamente el antídoto .
Gira la rueda y se desgasta
atascada en el dintel del laberinto.


08. 2013



Virginia F.A.


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